Hoy ha sido de esos días en que nada sale como uno pensaba…
Esta mañana me chocaron por detrás en una luz roja mientras iba a dejar a mi hermana chica al colegio.
Por suerte no nos pasó nada, pero tuve que desechar mi plan de ir a hacerme unos exámenes de sangre en ayunas que duran toda la mañana, para hacer todo el trámite de la constancia en Carabineros, y volver rauda a mi casa porque a esas alturas del partido ya estaba hangry (mi palabra favorita, y mi estado el 90% del tiempo: una combinación de hungry y angry, o enojada por estar hambreada).
Como estoy de dueña de casa, me mandaron urgente al supermercado a comprar pan y lechuga y tal, porque a pesar de haber comprado el domingo ya no quedaba nada (aunque no me quejo, AMO ir al supermercado, me hace el día).
Después pasé gran parte de la mañana dando vueltas por Santiago en busca de la torre de cupcakes que presté para el matrimonio de la semana pasada que tuve con Augusta® Cupcakes. Costó, pero después de varias horas y llamadas telefónicas la encontré 🙂
En fin, ¡¡¡¡un agote!!!!
A eso de las 12 ya estaba hangry nuevamente, y con ganas de comer algo rico, contundente para la larga tarde que se me viene (ir a la universidad, y luego dar yo una clase de cocina).
Pesqué un par de cosas que había en el refrigerador (7 ingredientes + sal y agua), e improvisé esta delicia en menos de 30 minutos… ¡No saben lo rico que quedó!
Partí por asar tomates cherry, zapallo, y un cebollín (la parte verde picada en trozos, y la blanca entera). La clave para hacer este receta en poco tiempo, es picar todo súper chico y de portes similares, para reducir el tiempo de cocción al mínimo.
Mientras eso estaba en el horno fuerte, cociné un poco de pasta integral.
Para cuando estaba lista, las verduras ya estaban en su punto perfecto.
Reservé un poco del agua de cocción de la pasta para hacer un pesto increíblemente sabroso y sin aceite, al que le eché la parte blanca del cebollín asado.
Luego sólo hay que mezclar la pasta tibia, con las verduras, el pesto, y garbanzos. Perfección pura.
Este plato es muy completo nutricionalmente ya que tenemos carbohidratos complejos, proteína, algo de grasas saludables, y verduras. ¿Qué mejor?
Aprovecha que todas estas verduras están en temporada y probablemente en tu refrigerador, y prepara este súper plato. ¡Te va a encantar!
Si haces alguna de mis recetas, recuerda compartirla en redes sociales con el hashtag #thesimplelifecl y de etiquetarme. Me encanta verlo 🙂

Ingredientes
- 1 taza de zapallo picado en trozos pequeños.
- 10 tomatitos cherry partidos por la mitad.
- 1 cebollín (la parte verde picada; y el tallo o parte blanca que usaremos en el pesto, en un solo trozo).
- 1/2 cucharada de aceite de oliva.
- 1/2 cucharadita de sal de mar.
- 160 gramos de pasta integral.
- 380 gramos de garbanzos cocidos (ó de lentejas cocidas).
Pesto Bajo en Grasas:
- 1 taza de hojas de albahaca.
- 1/4 taza de de agua de cocción de la pasta.
- Parte blanca del cebollín asado.
- 1/4 taza de de castañas de cajú crudas (o almendras, o nueces).
- Sal de mar.
- Pimienta.
Instrucciones
- Precalentar el horno a 220ºC. Preparar una lata con silpat o papel antiadherente.
- Mezclar los trocitos de zapallo, las mitades de tomatitos cherry, y el cebollín con el aceite de oliva y la sal.
- Hornear a 220ºC por 15 minutos.
- Mientras tanto, cocinar la pasta según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Drenar y reservar el agua de cocción para usar en el pesto.
- Cuando las verduras estén listas, sacar del horno y reservar mientras se prepara el pesto.
Pesto Bajo en Grasas:
- En el vaso de la procesadora poner la albahaca, la parte blanca del cebollín asado previamente, y las castañas de cajú. Procesar bien. Agregar sal de mar y pimienta a gusto, y procesar nuevamente.
Presentación:
- Mezclar la pasta cocida, con las verduras asadas, los garbanzos, y el pesto.
- Servir de inmediato.
Gracias por tu aportación. Feliz semana.