¿Confían en mí? Hagan este pebre con maracuyá. En serio. Es realmente de las cosas más ricas y adictivas que han salido de mi cocina.
Hace varios años probé un chutney de tomate y maracuyá en Londres (si no sabes lo que es un chutney, te recomiendo leer esta receta). La combinación era, curiosamente, muy buena, pero como tantas otras ideas que uno tiene durante viajes largos, se perdió en algún rincón remoto de mi cabeza… Hasta el 2015, cuando pasé el 18 de septiembre en Sydney.
Quienes me conocen saben que me encanta el pebre, una típica salsa chilena cruda en base a tomate, cebolla, cilantro, ají, limón, aceite de oliva y uno que otro condimento. Recetas de pebre hay por montones, y es de esas cosas que en cada casa se prepara en forma distinta, ajustándose a los gustos de la familia.
Cuando celebré mi cumpleaños en Australia, invité a mis amigos a un gran asado chileno-australiano: tenía goon con durazno (que mezclé en unos baldes negros de construcción -nuevos y limpios, por cierto-, but still, ¡qué horror!), mucho mucho vino y cidra, y toda suerte de cosas para la parrilla (mención especial a los sausage sizzles con pan de molde). Además de mi torta (de 3 capas: frutilla, brownie y plátano, con frosting de dátiles) preparé una fuente gigante de pebre que casi no salió de mi departamento, porque pillé a una de mis flatmates sentada frente a ella cuchareándolo, ¡já!
Con el resto de mis amigos el pebre tuvo el mismo exitazo, y durante el resto del intercambio me lo pedían en cuanta junta teníamos.
Y fue un día en que estaba en Paddy’s comprando las frutas y verduras para la semana, cuando me topé con unos maracuyás excepcionalmente fragantes y ricos… Obviamente compré decenas de unidades, y mientras caminaba de vuelta a mi departamento iba pensando en qué diantres iba a ocupar tanto maracuyá. Y recordé ese chutney londinense. Y se me ocurrió reemplazar el limón del pebre con pulpa de maracuyá. Y lo hice. Y quedó glorioso, y lo sigo haciendo y hoy les traigo la mítica receta que tantos paladares ha conquistado.
Una recomendación: pescar un pan amasado recién salido del horno, abrirlo con cuidado, untarlo con una gruesa capa de mantequilla y cubrirlo con pebre con maracuyá. De nada 😉
¡Recuerda ponerle nota a esta receta de pebre con maracuyá si la probaste, comentando acá abajo!
Ingredientes
- 3 tomates pera.
- 1 cebolla mediana.
- 1/2 atado de cilantro.
- 2 maracuyás grandes, su pulpa (2/3 de taza aproximadamente).
- 3 cucharadas de aceite de oliva.
- 1 cucharadita de sal.
- 1/4 de cucharadita de aliño completo.
Instrucciones
- Remover las semillas/pulpa de los tomates pera y picarlos en cubitos bien finos (puedes dejarlos con cáscara o sin, es cosa de gustos). Verter los cubitos en un bowl mediano y reservar.
- Pelar la cebolla y picarla bien fina. Juntarla con el tomate.
- Picar el cilantro fino. Agregarlo junto con el resto de los ingredientes al bowl con el tomate y cebolla, y mezclar todo.
- Rectificar la sazón en caso de ser necesario.
- Dejar reposar refrigerado en un recipiente hermético por al menos 15 minutos antes de servir.
- Consumir dentro de 2 días, y mantener refrigerado en un recipiente hermético.
viviana
Estimada Augusta: en buena hora se de tus recetas, el pebre de Maracuyá lo dejará cuando las encuentre, se ve apetitosa la receta
Gracias