Sí, sí, leíste bien. La receta de esta semana es de una tartaleta de zapallo (calabaza o auyama) crudivegana. No, ¡te prometo que no perdi la cabeza!
Hace algunos años probé un estilo de alimentación 100% crudivegano durante un mes y medio, y en ese tiempo probé un sinfín de recetas de todo tipo, para procurar comer bien y variado (puedes leer más sobre el crudiveganismo aquí). En mi eterna búsqueda por nuevas recetas y sabores, recuerdo haber visto en un grupo de Facebook que alguien subió una receta de pumpkin pie crudivegano. Al menos a mí, jamás se me había pasado por la cabeza la idea de comer zapallo crudo… Y esta forma de probarlo sonaba lo suficientemente exótica como para que partiera al día siguiente a comprar un zapallo al supermercado y me dispusiera a emular esa receta. Admito que no me fié mucho de esa persona, e igual busqué en internet si efectivamente no iba a morir de indigestión por comer zapallo crudo, y la respuesta (favorable, por cierto), la encontré acá.
El resultado de ese experimento fue un pie exquisito, en donde abundaban las características notas otoñales de especias como la canela, clavo de olor, cardamomo y nuez moscada. La textura del relleno era sedosa y muy suave, con un sabor sin igual. La masa de la base aportaba un dulzor muy rico y una nota crocante. La combinación fue todo un acierto. Por suerte en esa época anotaba gran parte de mis recetas en mi cuenta de Instagram personal, y por eso pude volver a echarle mano para compartirla hoy con ustedes.
Esta tartaleta la hice en parte con algunos productos que me llegaron de regalo de dos pymes que me encantan: De Mi Valle, con sus frutos secos; y Mi Jardín Secreto, con sus preciosas flores comestibles. Quiero enfatizar que lo que escribiré acá no está promocionado ni pagado, sino que viene exclusivamente de mi experiencia personal con estas marcas, como usuaria normal.
Jaime de De Mi Valle es ingeniero agrónomo de profesión pero lleva el campo en sus venas. Partió su propia agrícola a temprana edad, produciendo nueces y pasas de una calidad excepcional y vendiendo toda su producción a exportadoras. Este año dio un giro y empezó a vender toda su producción él mismo, junto con otros productos que mantienen el sello de calidad que caracteriza a su propia producción, a precios imbatibles. Hoy Jaime da trabajo a muchas personas, trabaja con productos orgánicos bajo el modelo de comercio justo, llevándonos los mejores frutos secos y productos a la puerta de nuestras casas. Partí comprando a De Mi Valle como cualquier persona, por recomendación de otros amigos blogueros y me encantaron la calidad de los productos y el buen servicio. Hoy le he estado aceptando una suerte de canje (¡mal que mal hay que mantener el blog!), pero quiero ser súper transparente con ustedes con eso: sólo lo recomiendo porque me ENCANTAN sus productos, tienen un muy buen precio, y porque comulgo en un 100% con su filosofía.
Las flores comestibles con las que decoré mi tartaleta de zapallo crudivegana son de Mi Jardín Secreto, una preciosa empresa familiar que da trabajo fundamentalmente a mujeres a las afueras de Santiago en la localidad de Buin. Hace harto tiempo que compro sus hierbas frescas y flores comestibles en el supermercado, y tenía una pequeña huertita en mi jardín usando los maceteros listos que también venden ahí (huertita que pasó a mejor vida con la nevada de julio en Santiago). Cuando estaba preparando la producción de fotos para mi primer libro (que, dicho sea de paso, se lanza oficialmente a fines de noviembre), los contacté para pedir hierbas frescas para la sesión de fotos. Cuando Alejandra, su dueña, supo que era para mi libro, me mandó todo tipo de hierbas frescas de regalo… ¡Incluyendo una huertita! Debo reconocer que me puse a llorar de emoción cuando llegué a mi casa esa noche y vi todas las cosas que Ale me mandó con tanto cariño. En mi casa compramos los mix de hojas verdes (tienen unas mezclas buenísimas) y las hierbas frescas de Mi Jardín Secreto hace harto tiempo, y lo seguimos haciendo 🙂
Para hacer esta tartaleta de zapallo crudivegana lo mejor es tener una máquina súper potente para que no queden grumos de zapallo crudo. Yo uso y recomiendo a ojos cerrados el robot de cocina modelo Kitchen Pro de Easy Ways, porque de verdad hace este (y todo tipo de) trabajo(s) en forma espectacular. En esta página del blog les cuento mi experiencia usándolo, de verdad ha sido por lejos la mejor inversión gastronómica que he hecho.
A falta del robot de cocina, puedes preparar la tartaleta de zapallo crudivegana con una licuadora o procesadora de alimentos potente, pero siempre ajustando los tiempos de procesado para lograr la textura sedosa y homogénea necesaria para que el relleno quede perfecto.
¡Recuerda contarme si haces esta receta y de ponerle nota, comentando aquí abajo!
Ingredientes
a. Base.
- 1 1/2 tazas de almendras naturales (200 gramos).
- 1 1/2 tazas de pasas (200 gramos).
b. Relleno
- 2 tazas de zapallo crudo, sin cáscara ni semillas (280 gramos).
- 1 plátano maduro.
- 1/4 de taza + 2 cucharadas de leche de almendras o de coco (100 ml).
- 3 cucharadas de aceite de coco derretido.
- 2 cucharaditas de canela en polvo.
- 1 cucharadita de jengibre en polvo.
Instrucciones
1. Con robot de cocina de Easy Ways.
- Procesar los ingredientes de la base a velocidad 10 durante 40 segundos hasta obtener una miga. Reservar 40 gramos. Cubrir la base de un molde rectangular de fondo desmontable de 10 x 30 centímetros con el resto de la miga.
- Sin lavar el vaso, procesar los ingredientes del relleno durante 4 minutos a velocidad 10 progresiva, raspando las paredes del vaso ocasionalmente.
- Verter el relleno sobre el molde con la masa, y espolvorear la miga reservada.
- Refrigerar durante mínimo 2 horas antes de servir.
- Mantener refrigerado por hasta 5 días.
2. Tradicional.
- Procesar los ingredientes de la masa hasta obtener una miga fina. Reservar 1/4 de taza.
- Forrar un molde de 10 x 30 centímetros con la miga.
- En el mismo vaso de la procesadora, verter todos los ingredientes del relleno, y procesar hasta obtener una pasta lo más homogénea posible.
- Verter el relleno sobre el molde preparado, y espolvorear la miga reservada.
- Refrigerar durante mínimo 2 horas antes de servir.
- Mantener refrigerado por hasta 5 días.
María José Prieto
Hola Augusta,
preciosa tu foto y aunque no soy ni vegetariana, esta receta la encontré interesante porque soy fanática del zapallo (del chileno, porque el butter no sé qué americano lo encontré un poco desabrido) La voy a probar y si no me gusta crudo, lo sancocho al horno y listo, además la «masa» me encantó! Y gracias por los datos de los frutos secos.
Augusta
Gracias María José!
Cuéntame cómo te va con el relleno! <3 (yo también soy fanática de la masa, ¡es de vicio!)
Maria
Excelente receta!! Este fin de semana la haré! Una duda, el 1/4 de masa que reservas, es para mezclar con el resto de ingredientes?
Gracias!
Augusta
Hola! Es para decorar 🙂
Cata Desormeaux
Me llevé aplausos y felicitaciones de mis suegros! La verdad es que quedó riquísimo, parece casi lúcuma…. eso sí le agregué otro plátano extra y un poco más de leche de almendras para que quede más altito.. ahh! y un poco de miel también por que somos dulceros… ‘Toda una experiencia de aromas y sabores’, dijo mi suegro.
Gracias Augusta !