En un bowl grande, mezclar el harina con la sal. Reservar.
En la taza donde se midió el agua, incorporar la levadura, el azúcar rubia y el aceite de oliva. Mezclar con un tenedor y dejar reposar durante unos minutos para que el azúcar se disuelva y la levadura se active.
Incorporar los ingredientes húmedos a los secos y mezclar con un tenedor dentro del bowl para integrar. Traspasar a un mesón enharinado, y amasar enérgicamente por 5 minutos o hasta obtener una masa suave y elástica que no se pega al mesón ni a las manos.
Dejar la masa reposar cubierta por un paño en un recipiente previamente aceitado por 30 minutos o hasta que doble su tamaño.
Dividir la masa en 18 porciones iguales y formar bolitas. Disponer sobre una lata de horno preparada con silpat o papel mantequilla, dándoles la forma deseada. Dejar leudar cubiertas con un paño de cocina por 25 minutos más o hasta que doblen su tamaño.
Armado.
Precalentar el horno a 180ºC.
Pincelar las bolitas con 1/2 taza de pesto y opcionalmente espolvorear con queso rallado. Hornear a 180ºC por 20 minutos o hasta que estén cocidas.
Servir con pesto extra y salsa de tomates para untar.